Por Santiago Bardotti para Revista Ñ – 21/2/2012
Considerado uno de los mayores especialistas en Historia de Francia del siglo XVIII, desde su despacho como director de la Biblioteca de la Universidad de Harvard, EE.UU., Robert Darnton atiende el teléfono con voz amable y serena, para hablar, entre otras cosas, de El beso de Lamourette, una serie de ensayos que reflexionan sobre la historia, los medios de comunicación y la historia de los medios , tomando para el título el apellido de un obispo que trabajó como ghost writer de Mirabeau.
En pleno auge de la era digital, pionero en el campo de la historia del libro, con inusual optimismo, Darnton ve cómo su objeto de estudio parece desvanecerse en el aire para transformarse en otra cosa. A su juicio, no hay lugar para la nostalgia, sin embargo: la historia del libro, como la de la tecnología y la de las ideas no puede ser sino una historia de la trasformación; del encuentro entre pasado y futuro. Ante la proclamación general de que “vivimos en la era de la información”, contesta: “Toda era fue una era de la información, cada una a su manera y según los medios disponibles en ese momento”. En complejizar y analizar esa historia ha invertido buena parte de su obra.