Este libro ofrece una lectura sobre tres generaciones que transitaron contextos de pobreza, hambre y programas alimentarios. Desde los años ochenta, estas intervenciones presentan una vigencia permanente en la política social de Argentina. Con un carácter paliativo y provisorio bajo los rótulos de asistencia, emergencia o ayuda han complementado la alimentación de amplios sectores sociales. Estas intervenciones configuraron modos de ser y sentir(se) titular de cada programa e impactaron en los esquemas de percepción en torno la emergencia alimentaria y las prácticas del comer.
Las infancias que décadas atrás acompañaron a familiares a retirar el bolsón de mercadería, en la actualidad son titulares de programas de transferencia monetaria para la compra de alimentos. Mientras la primera generación vivenció el acceso a los programas con vergüenza, con el paso de los años esas prácticas marcaron en las siguientes generaciones experiencias atravesadas por la desconfianza, la incertidumbre y el miedo a perder el programa. Asimismo, las estrategias de organización colectiva del comer presentan intersticios en los que emergen lazos de confianza, amor y esperanza.
María Victoria es doctora en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires (UBA) y licenciada en Sociología por la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP). Actualmente se desempeña como becaria posdoctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) en el Instituto de Humanidades y Ciencias Sociales (INHUS) de la UNMDP y como docente de grado y posgrado. Sus temas de investigación son las políticas sociales, el problema alimentario y las emociones.