El Protréptico es una obra de Aristóteles que conservamos de forma fragmentaria. En ella el autor realiza una exhortación a la filosofía como la actividad más deseable y útil para el hombre. Para demostrar esto, Aristóteles realiza una interconexión entre el plano ontológico, el gnoseológico y el antropológico tendiente a mostrar que la filosofía es una actividad inherente a la naturaleza humana, razón por la cual no solo es central para la realización personal del individuo, sino que es un beneficio para la polis.
Las concepciones que sirven de fundamento de este ideario filosófico permiten trazar una relación de continuidad y ruptura con el pensamiento de Platón que es central para entender la postura aristotélica allí defendida. A lo largo de estas páginas intentaremos analizar ese ideario de la filosofía a la luz del juego de convergencias y tensiones entre sus concepciones y las platónicas.
Claudia M. Seggiaro es doctora en Filosofía (UBA). Como investigadora del CONICET, su principal área de trabajo es la filosofía antigua. Se desempeña como docente de la materia Historia de la Filosofía Antigua (Facultad de Filosofía y Letras – UBA) e Introducción al Pensamiento Científico (Ciclo Básico Común de la UBA). Es autora de artículos en revistas especializadas en filosofía griega clásica, en su mayoría sobre distintos aspectos de la filosofía aristotélica.